La mamoplastia de aumento con implantes es una cirugía frecuente realizada en nuestro medio que busca aumentar el volumen de los senos, mejorando la proyección de la mama y creando un aspecto mas redondo especialmente en la mitad superior de las misma. En la mayoría de los casos es una cirugía que se practica como un único procedimiento, sin embargo puede combinarse con cirugías corporales como la liposucción o la abdominoplastia o con cirugías faciales como la blefaroplastia o la rinoplastia. Cuando se realiza como procedimiento único es una cirugía de 2 horas de duración en promedio de carácter ambulatorio, es decir la paciente ingresa a la clínica y el mismo día regresa a su hogar. Para la cirugía se requiere anestesia general, la cual es suministrada por el anestesiólogo.
Existen algunas recomendaciones a seguir antes de una mamoplastia de aumento, en el caso de consumir medicamentos que alteren la coagulación, es decir que mantengan la sangre mas liquida, se recomienda suspenderlos en promedio dos semanas, esto incluye los antiinflamatorios y la aspirina e incluso los medicamentos herbales o naturales, pues su uso pueden aumentar el riesgo de sangrado durante la cirugía o la producción de hematomas que es la acumulación de sangre en el espacio creado para la inserción de los implantes. Ademas las pacientes fumadoras se recomiendan suspender el cigarrillo al menos un mes antes de la cirugía y tres meses después debido al riesgo aumentado en alteraciones en la cicatrización y complicaciones respiratorias asociadas a la anestesia.
Desde el día de la cirugía se recomienda el uso del brasier o sostén postquirúrgico que se caracteriza por ser confeccionado con materiales suaves que ejercen una presión homogénea en la mama y no tienen varillas, además con broches o cremalleras adelante, y en los hombros que facilita la postura y el retiro, en general su uso se recomienda durante el primer mes luego de la cirugía.
Luego de la anestesia se inicia una alimentación rica en líquidos pero libre de productos que aumenten las nauseas o el vomito como los lácteos, preferiblemente dietas blandas, con abundantes líquidos fáciles de digerir y que no caigan pesado al estomago.
Los medicamentos analgésicos deben iniciarse tan pronto se llega a casa siguiendo las frecuencias recomendadas por el medico en la formula medica. El uso de antibióticos en general no están indicados, excepto los aplicados antes o durante la cirugía.
Desde el primer día de la cirugía se recomienda iniciar la deambulación, con pequeñas caminadas en la habitación y desplazamientos cortos, esto con el fin de evitar la formación de coágulos o trombos en los miembros inferiores, las caminadas se van incrementando progresivamente en duración con el paso de los días y según se sienta la paciente. El ejercicio, las relaciones sexuales y las actividades físicas fuertes deben evitarse el primer mes luego de la cirugía, las cuales se pueden iniciar antes según la evolución y el grado de cicatrización de la paciente.
El hielo debe usarse dentro de de una bolsa plástica y envuelto en una tela. Se recomienda su uso los primeros dos a tres días con el fin de disminuir el edema y la inflamación. Debe aplicarse sobre el brasier durante 15 a 20 minutos y se repite cada hora.
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Adolfo Alejandro López Rios.
Cirujano Plástico, Estético, Maxilofacial y de la Mano.
Universidad de Antioquia.
Profesor Cirugía Plástica, Estética, Maxilofacial y de la Mano.
Universidad de Antioquia.